lunes, 4 de mayo de 2015

~Dimensional Heroes~ Capítulo 13: Altos vuelos

Estoy en una llanura a unos quilometros de la estación y, según la consola, justo aquí debería estar el tynooniano, sin embargo, aquí no hay nada ni nadie. Mi primera búsqueda fallida. Estoy apunto de romper la consola contra el suelo cuando noto que me da la sombra. Miro arriba y veo muchas plataformas volando, cada vez mas grandes y más altas. No me apetece nada subir, pero él debe de estar por ahí. Apunto mi brazo hacia la plataforma más cercana (aunque está bastante alta) y disparo las cadenas, que aciertan en el blanco y me impulsan hacia la primera plataforma, y me consigo agarrar al borde de la primera plataforma.

Me impulso y consigo subir. Veo que se trata de una plataforma de roca que se mantiene en el aire gracias a una runa que, por los símbolos, tiene encerrado algún hechizo de levitación. Sigo subiendo de plataforma en plataforma lentamente (por supuesto, iría bastante más rápido y seguro si no tuviera acrofobia) hasta que llego a una enorme plataforma con un edificio parecido a un mini-castillo en el centro.

Nada más acercarme, una explosión eléctrica destruye un muro y sale volando alguien al que no puedo ni ver antes de que desaparezca entre destellos. Un poco más inquieto, me adentro en la pequeña estructura, y veo a un chico de más o menos mi edad sentado y descansando. Su armadura está compuesta de una cota de malla gris y coraza, guantaletes y hombreras de color verde claro. Parece ligero y resistente a la vez. Lleva una espada enorme, con un filo desproporcionado comparado con la empuñadura. El filo está dividido en tres secciones: Dos estrechas a los lados que acaban en punta y otra mas ancha en el medio, con líneas horizontales colocadas hasta llegar al final, que está mas abajo que las otras dos partes. Parece irradiar... electricidad.

-Hola -digo.
-Ah, hola -me contesta-. ¿A qué has venido?
-Bueno, verás; acabo de unirme a la liga y vi que tú estabas justo por encima mía, así que...
-Eso era antes -me contesta-. Cometí el error de  ser el primero en luchar y ganar una batalla, y entonces todo el mundo ha empezado a venir a por mí para conseguir más puntos. Al menos tú no has venido por eso.
-¿Cuántos han venido aquí? -pregunto.
-¿Aquí? ah, no; yo fui el primero que vino aquí para enfrentarse a un tío, y después de ganarle, me quedé aquí un día a investigar todos estos islotes y plataformas. Ese día vinieron cinco a por mí, y hoy solo uno. Tú eres el siguiente.
-¿Y no has perdido ninguna?
-No, pero por poco. Comprende que no puedo luchar contra ti ahora, estoy cansado y herido.
-No te preocupes por eso.

Me concentro y logro sacar una curación mayor de la habitual, y entonces se la lanzo al chico, que la absorbe.



-¿Mejor? -pregunto.
-¿Cómo has hecho eso?
-Habilidades curativas de los oscuros, supongo.
--se ríe- Pues te voy a enseñar los poderes de los de viento.

Empezamos la batalla poniéndonos en posición. Como siempre, espero a que ataque el primero, pero no lo hace, de forma que tengo que empezar yo. salgo corriendo con la katana lista para desenvainar y cuando estoy a medio meto de él, clava su espadón en el suelo y de este sale una explosión eléctrica, que me hace salir por los aires. También se habían desprendido algunas rocas. Él viene hacia mí listo para darme un golpe duro, pero entro en sigilo y rápidamente me coloco a su espalda. Como no me da tiempo a sacar mi katana, le doy dos patadas en la nuca con las dos piernas. Luego, intento darle con la katana, pero me bloquea con su espada, haciendo que algunas chispas me acalambren las manos, pero se me pasa rápidamente. Entonces, inesperadamente, me lanza rayos por las manos que me dejan aturdido unos segundos, en los que él aprovecha para darme un golpe tremendo con el espadón, el cual me lanza volando rompiendo otra pared de la estructura. Cuando estoy apunto de caer a otra plataforma, lanzo las cadenas y las clavo por debajo de la plataforma; y gracias al impulso, subo rápidamente por el otro lado y le doy una patada inesperada por la espalda, tirándolo al suelo.

-¿Cómo has podido siquiera sobrevivir a un golpe tan fuerte? -me preguntan.
-¿Y qué mas da el cómo?

Decido no curarme (puedo aguantar perfectamente) y sacar partido de mi gen. Él viene a por mí, espadón en alto, y me intenta dar un golpe desde arriba, pero lo esquivo. Sin embargo, la runa se rompe y salen grietas en el suelo y empieza a desmoronarse. Corro hacia el borde y salto a otra plataforma, pero antes de aterrizar, me lanza un rayo y me desestabiliza, haciendo que me choque contra el borde, para luego caer de espaldas contra otra plataforma. Me levanto a pesar del dolor y veo a mi enemigo caer sobre mi con su espada alzada, sin embargo, lanzo las cadenas y consigo darle un latigazo en la cara, desestabilizándole y desviando su camino hacia el suelo; entonces me tiro hacia él y aprovecho la ventaja aérea, ya que no puede usar su arma en el aire por culpa de su peso, y le doy cortes hasta que cae al suelo. Aterrizo al lado de el y le clavo a Masamune en el corazón, haciéndolo desaparecer en destellos.

Miro la consola: 15 puntos. A por el siguiente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario